Lo confesamos de entrada: luego de ver los primeros 5 minutos de este
film, sentimos envidia. Sí, envidia, pues nos percatamos en ese breve
lapso de que estábamos viendo una película manejada por un profesional,
por una persona que sabe hacer cine sin necesidad de adornitos, efectos
especiales carísimos ni superestrellas.
Por supuesto, no es que
“200 cartas” sea el film del año, la última Coca Cola en el desierto ni
nada por el estilo, pero sí eso que dijimos y reafirmamos.
“200
cartas”, siendo una comedia romántica, parte de una idea que, salvo que
alguien nos corrija, encontramos original: Raúl trabaja en una empresa
junto a Juan, en Nueva York, pero en su mente, en su corazón, lo que
vibra es una pasión fortísima: la creación de una novela gráfica
protagonizada por un personaje llamado Iro (que significa ‘hombre’ en
lengua taína, así como Irauna es ‘mujer’). Raúl vive inmerso en esa
obsesión pero, para distraerle, Juan le invita a unos tragos en un bar y
allí conoce a María Sánchez y se siente fuertemente atraído por ella.
Luego de un incidente en el bar, la chica se marcha mientras Raúl queda
inconsciente luego del pleito, pero tiene en su poder un collar que
María dijo aprecia porque era de su abuela.
Infatuado, Raúl decide ir a Puerto Rico a buscar a la chica, va con
Juan, conocen a Yolanda y a Rebeca y la primera decide ayudarle a buscar
a la María. Pero hay 200 María Sánchez en la guía y, para facilitar la
tarea, deciden enviar una carta a cada una y esperar respuesta.
Y allá van Raúl, Juan, Yolanda y Rebeca tras la etérea amada.
http://listindiario.com.do/entretenimiento/2013/9/27/293774/200-cartas-bien-hecha
No hay comentarios:
Publicar un comentario